jueves, 21 de diciembre de 2006

Buffalo Bill, en Barcelona

Éste es el titular (probable) del 21 de diciembre de 1890.



William Frederick Cody "Buffalo Bill" llegaba ese día a Barcelona con su espectáculo "Buffalo Bill's Wild West", con 1.500 actores, muchos de ellos indios. La pena fue que ese mismo año murió Toro Sentado, que también estaba en el circo, con lo que los barceloneses no lo pudieron ver a un auténtico Gran Jefe Indio.


Supongo que habría miles de anécdotas que ocurrieron durante las 5 semanas que estuvieron. Me referiré a dos: en el barrio donde estaba instalado el circo desaparecieron dos niñas y los vecinos acusaron a los indios de habérselas comido. Buffalo Bill se enfadó, alegando (con razón) que los indios eran personas normales y que no comían carne humana.


La otra anécdota es que, durante su estancia, 10 indios murieron, no se sabe si de gripe o de cólera, y fueron enterrados en un cementerio de Barcelona.


Fuentes para el artículo: Las Historias de la Historia, de Nieves Concostrina en RNE Radio 1. Y luego, como siempre, la Wikipedia. Hay un par de pequeñas biografías que he encontrado (1 y 2).

2 comentarios:

Farfu dijo...

Los indios de Buffalo Bill también tuvieron problemas dos años antes, 1988, durante las investigaciones por los crímenes de Jack el Destripador. Las víctimas estaban tan destrozadas que mucha gente pensó que eso sólo podía ser obra de salvajes, y como casualmente había salvajes por allí cerca ...
La cosa terminó con que Buffalo Bill tuvo que reanudar su gira europea y algunos de sus indios tuvieron que quedarse en Inglaterra hasta que los dejaron libres y se unieron a otro circo de indios y vaqueros que pasó por la ciudad.

Recordado de esta novela gráfica "From Hell"

Bloggesa dijo...

Farfu, tiene que haber un error. La fecha será 1888. De todas maneras, imagínate el miedo que tenían que provocar los "pieles rojas" en la Inglaterra de finales del siglo XIX. Lo triste es que ellos, los "pieles rojas", eran los que tenían que temer al hombre blanco, siempre tan empeñado en culpar a quien sea de sus atrocidades.